Como enfocarse en un objetivo deportivo sin perder motivación

1. COMPRENSIÓN DE LA META A SEGUIR:

Comprensión no es lo mismo que pensamiento.

Al cabo del día nos pasan aproximadamente 40.000 pensamientos de forma aleatoria, todos ellos la mayor parte del tiempo son simples pensamientos absurdos que no nos potencian para nada: preocupaciones, que haceres futuros o pasados y un largo etcétera.

Un bebé se convierte en niño desarrollando sus habilidades de andar y empezar a interpretar el mundo que ve, y cuando llega a la edad adulta, se convierte en fruto de sus experiencias y mecanismos de aprendizaje.

Por ejemplo, la diferencia entre un niño y un atleta de alto rendimiento, es que el nivel de comprensión se ha profundizado, no sólo en una parte de esa persona, sino al completo.

En una misma competición, dos atletas puedes ser muy diferentes en áreas como disciplina mental, resistencia, coordinación, administración del tiempo, equilibrio de obligaciones y relaciones. Cuando compruebas cuán amplio es el alcance de la conciencia, empiezas a comprender que nada está excluido.

''La comprensión modifica la imagen total de la realidad''

- Deepack Chopra.

Ser capaz de influir en la totalidad de tu realidad al mismo tiempo es la esencia de la motivación en un atleta. Siempre les digo a mis alumnos que el 70% de los éxitos, se debe a los tres cuerpos que dependen de la parte psicólogica, y un 30% es conocer las herramientas que nos llevan a ese objetivo como la dieta y el entrenamiento. Sin duda, si la motivación (la psicología) falla, da igual que conozcamos las mejores herramientas de entrenamiento o la mejor estrategia nutricional.

No hay límites para la influencia que puedes ejercer, pero para descubrir esto debes abordar la vida con pasión. La pasión libera toda energía que posees. En ese momento te juegas el todo por el todo, por si pones todo lo que tienes en una competición coma tus defectos y debilidades también quedan expuestos, ya que la motivación y la pasión con que lo haces, saca toda la luz.

De hecho no contar con la suficiente pasión y motivación desanima a muchas personas en sus objetivos, personas que se centran demasiado en sus aspectos negativos, y se sienten tan limitados por ellos, que hace que su falta de confianza baje demasiado para lograr su meta.

2. ¿CÓMO LOGRAMOS NUESTRA META?

Hay tres formas de abordar un objetivo:

A) Abordar una situación solo hasta encontrar el primer obstáculo real.

B) Abordar una situación lo suficiente para superar algunos obstáculos.

C) Abordar una situación para vencer todos los obstáculos.

Usando este modelo, piensa en un objetivo, puede ser en el ámbito deportivo, o para cualquier meta de tu día a día. 

Evalúate honestamente y haz introspección de la situación:

A. No estoy satisfecho con lo que he logrado.

• Las cosas no resultaron como yo quería. Otros tuvieron mejor desempeño que el mío. 
• Perdí la motivación y me desanime.
• Sigo sin saber bien qué debo hacer. 
• Creo que he fracasado.

B. Estoy bastante satisfecho con mis logros. 

• Mi desempeño no siempre es el mejor pero sigo adelante. 
• La gente confía en mí porque sé lo que hago. 
• He vencido muchos obstáculos para llegar a ser así de bueno.
• Siento esencialmente que soy un triunfador.

C. Dominé lo que me propuse.

• Las personas me miran con respeto y me consideran una autoridad. 
• Conozco todos los recovecos de esto y me siento tremendamente satisfecho por ello. 
• Ya casi no necesito pensar en los pormenores ya que mí intuición me guía.
• Está área de mi vida es una de mis grandes pasiones.

Cada nivel de compromiso refleja la comprensión que estás dispuesto a alcanzar.

La voluntad de entrar en cada parte de ti abre la puerta a la comprensión total de uno mismo. Te juegas todo a tu identidad, no solo a una parte. Esto puede parecer sobrecogedor, pero es de hecho la manera más natural de abordar cualquier situación. Cuando retienes una parte de ti, no aceptas las situaciones conforme vienen, le niegas contacto con la vida; entonces reprimes tu energía y evitar que comprenda lo que necesita saber. Entonces la motivación puede verse por los suelos.

En términos más sencillos, nuestros propios juicios de la situación hace que agrandemos las situaciones de darle poder a este tipo de pensamientos:

- No quiero verme mal (culturismo).

- No quiero caerme (ciclismo).

- No quiero que nadie me vea fracasar (deportes retransmitidos).

- No quiero gastar toda mí energía (deportes de larga distancia).

- No quiero dolor (deportes de contacto).

- Quiero que la competición se acabe lo antes posible (no disfrutar del camino y salirse del momento presente sin disfrutar el día a día).

Imagínate que un niño que está aprendiendo a andar tuviera todos estos pensamientos, simplemente nunca aprendería caminar o lo haría con vacilación.

La oportunidad de alcanzar la maestría en algún ámbito de su vida se vería afectada.

Sin embargo, los adultos recurrimos a este tipo de pensamientos constantemente y como resultado, pueden verse afectado los objetivos.

Nadie puede cambiar el hecho de que todos los aspectos negativos de una situación se expresa en el instante en el que la situación surge, junto con todos los aspectos positivos.

No podemos escapar de las decisiones internas que hemos tomado, pero si podemos aprender a que nos afecten cada vez menos y retomar el locus de control interno. Entonces podremos darle la vuelta a la situación.

''Todo lo que has decidido sobre ti está en juego en este instante''

- Deepak Chopra.

• No creer es estar en contra.
• Creer es aceptar.
• Creer no es ser crédulo, sino aceptar y y apreciar.
• No puedes apreciar aquello en lo que no crees ni puedes sentirte agradecido por algo a lo que no le atribuyes valor.
• Por juzgar se tiene que pagar un precio porque juzgar es fijar un precio.
• Y el precio que fijes es el que pagarás.
• Juzga menos y alcanzarás tus objetivos.

Por fortuna, estas decisiones individuales pueden examinarse y modificarse. Como todos los aspectos negativos están justo frente a ti, no necesitas ir en su búsqueda. Lo que las personas experimentan como obstáculos en la vida son reflejos de una decisión mediante la cual rechazaron la COMPRENSIÓN.

Sí rechazas demasiada comprensión te conviertes en una víctima sujeta a fuerzas que te abruman y apabullan. Estas fuerzas son huecos en tu conciencia, lugares donde no has ido capaz de mirar.

3. NO QUIERO VERME MAL:

Esta decisión se relaciona con la imagen propia. Versebien significa preservar una imagen, pero las imágenes son solo fotografías congeladas. Da la impresión más superficial de quién eres. A la mayoría de las personas se les dificulta superar su imagen propia y aceptarse tal y como son. Crean cierta apariencia, cierta manera actuar, cierto nivel de gusto, estilo de vida y estatus que se engranan en quienes creen que son. Imagen propia se proyecta en cada situación nueva con un resultado posible: Me veo bien, o me veo mal. Mucho tiempo atrás, estas personas decidieron que nunca se verían mal si podían evitarlo.

La única manera en que puedes contar estar estos patrones es mediante tu voluntad de olvidar cómo te ves.

Reflexiona por tanto hoy éstas ideas hasta comprender porqué haces lo que haces:

• El triunfo no viene de verse bien. Una cosa no tiene nada que ver con la otra.
• Apasionarse por algo se ve bien desde dentro, que es lo que importa.
• Verse bien desde dentro no es una imagen física. Es un sentimiento interno de satisfacción.
• No te sentirás satisfecho mientras sigas una imagen en tu mente.

4. NO QUIERO CAER:

Esta decisión gira alrededor del fracaso, que a su vez gira alrededor del juicio. En el ámbito del patinaje por ejemplo, están acostumbrados a caerse y levantarse porque ellos significa aprender. Son todas etapas que requieren habilidad y con las que te desarrollas. Si consideras que tus primeros esfuerzos son fracasos, te opones a un proceso natural de aprendizaje.

En general, las personas que temen caer, fueron ridiculizadas y humilladas en el pasado. Para la mente, ''caer significa que no valgo''.

Junto a verse mal, la segunda reserva mental más nociva es el miedo a caer y sentirse como un individuo sin valor.

Hoy analízate honestamente con estas ideas:

• Nivel 1: Me siento desolado cuando fracaso. No puedo librarme de este sentimiento durante días, y cuando recuerdo mis más grandes fracasos yo vivo con intensa fue la humillación.

• Nivel 2: Me siento tan mal cuando fracasó que generalmente abandono. Me cuesta mucho volver a la competición pero finalmente lo hago. Es una cuestión de orgullo y amor propio.

• Nivel 3: Me tomo con calma al fracaso porque me importa más alcanzar mis objetivos. Aprendo de mis fracasos. Hay algo positivo en cada revés. Si puedes aprender de tus errores, no has fallado.

• Nivel 4: No pienso en términos de ganar o perder. Permanezco concentrado y observo mi desempeño en cada situación. Cada respuesta me muestra un nuevo aspecto de mi mismo. Quiero comprender todo, y desde esa perspectiva, la experiencia es como pasar otra página en el libro de la evolución.

Una vez veas donde te encuentras, intenta pasar al siguiente nivel.

• Primero, las personas en este nivel son hipersensibles a los reveses, las personas en este nivel son hipersensibles a los reveses y los toman de manera tan personal que abren sus viejas heridas una y otra vez. Solo es tu caso, vuelve a lo básico. Encuentra algo muy sencillo de hacer coma cómo un objetivo pequeño (una carrera de 5 km por ejemplo). Aparta tiempo para esa actividad, y mientras las estés llevando a cabo, percibe como se siente triunfar. Soy como un buen padre y elógiate. Si las cosas salen un poco mal, piensa que no hay problema. Necesitas reformatear tu manera de sentir respeto de establecer una meta y alcanzarla.

• Segundo, dentro de ti hay una voz desalentadora que percibes muy pronto y hala quedas demasiado crédito. Desarrolla progresivamente una conexión con la voz interna. Esta también está en ti pero ha sido ahogada por la voz de la crítica. Incrementa gradualmente los retos que puedes enfrentar. Percibe que se siente al ser alabado. Asimila hecho de que te lo mereces. No te compares con nadie más que tú mismo, tú estás dónde estás y en ninguna otra parte. Sigue reforzando sus éxitos.

• Tercero, por lo menos una vez al día, haz algo que consideres un éxito y que suscita elogios de ti o alguien más, como cocinar algo sano por ejemplo. Asegúrate de que el ojo externo sea sincero. Tomara tiempo, pero luego en un tiempo notarás que la voz interior está empezando a crecer positivamente. Aprenderás a confiar en ella, mejorará tu intuición y llegarás a entenderte mejor.

• Cuarto, para mejorar la motivación puedes unirte a un equipo o buscar un entrenador. El llamado efecto manada mejora notablemente la motivación, en el mundo de las tecnologías que vivimos es fácil crear una pequeña tribu de un objetivo concreto y apoyarse cuando la motivación decae.

Por último decir que las personas que han superado los fracasos, vuelven para ser más fuertes. Disfrutan más de sus objetivos porqué han aprendido a enfrentarlos. Si es tu caso enhorabuena, profundiza en esa maestría. Porque en la mente está todo amigos.

''Tanto si crees que puedes, como si no, estás en lo cierto''

- Henry Ford.